Cuando hablamos de estar presentes, estamos hablando de un poderoso principio de la sabiduría ancestral. Implica ubicar a nuestra mente y energía totalmente en el aquí y ahora, lo cual es muy saludable.
Emocionalmente, tiene un gran impacto, ya que nos aleja de las emociones tóxicas en dos sentidos:
– dejamos de sentir arrepentimientos y culpas por lo que hicimos o dejamos de hacer en el pasado,
– dejamos de sentir preocupación o miedo acerca del futuro.
En el presente puede haber desafíos o problemas concretos que enfrentar, pero a diferencia del pasado o el futuro que se nos evaden, en el presente podemos actuar y decidir con pleno comando de nuestra energía y conciencia.
En este mundo que habitualmente nos provoca alejarnos del presente, a veces es difícil alcanzar ese estado y por eso comparto aquí algunos recursos para que utilices siempre que lo necesites.
Como todo lo que procede de la espiritualidad natural es sencillo de aplicar y muy efectivo.
1. Conecta con la realidad sensorialmente. Toca los arboles, huele las flores con mucha atención, siéntate a escuchar a las aves, camina descalzo/a, recibe la lluvia en tu piel o disfruta los rayos de un buen sol.
2. Realiza una tarea creativa de detalle. Pintar mandalas, hacer collages, tejer atrapasueños, por ejemplo, son tareas que demandan nuestra concentración, sin distracciones y eso nos devuelve inmediatamente al presente.
3. Enraízate. Estés donde estés, siempre es buena idea para estar presente utilizar una visualización de enraizamiento, imaginando que desde las plantas de tus pies se extienden raíces que llegan al núcleo del planeta y se abrazan a él.
4. Realiza caminatas de poder. Camina sincronizando el ritmo de la caminata con tu respiración, volviendote plenamente conciente del acto de caminar, el movimiento de tus articulaciones, la tensión y aflojamiento de tus músculos.
5. Utiliza afirmaciones. Repetir: «Estoy plenamente presente en el aquì y ahora» es una buena manera de volver al presente cuando el pensamiento nos ha movido de allì.
6. Realiza tareas en la tierra. Una pequeña huerta es un mágico mundo en donde explorar la presencia. Quitar las hierbas, regar, remover el suelo, preparar nuevos cultivos, cosechar, son actividades que exigen de nosotros plena atención y además, nos permiten conectar con la vida en el aquì y ahora.
7. Utiliza la postura del guerrero. Las emociones tóxicas (como la culpa o el miedo) nos hacen inclinar el cuerpo hacia adentro, como resguardandonos de un ataque. En cambio, la fortaleza y confianza -habitualmente asociada con los guerreros de la tribu- nos motivan a mantener la espalda derecha, el pecho abierto y la mirada directa hacia adelante. Cambia de postura y cambiarás inmediatamente tu estado interno, regresando a tu poderosa presencia.
Hasta la próxima!
Flavia Carrión
En nuestro TALLER DE CHAMANISMO INTEGRAL aprendemos técnicas que nos ayudan a estar mas presentes y concretar nuestros objetivos aplicando las herramientas de la sabiduría ancestral.
Gracias,Flavia,como siempre no dejo de agradecerte por tus enseñanzas,Bendiciones!!!!abrazo..
Gracias, muy util. Las tareas que requieren concentración son maravillosas para parar el dialogo o a veces monologo interno. Nos sacan del»rollo». Ademas la jardinería, o algo artistico son muy placenteros